ECHAR A VOLAR LA IMAGINACIÓN crear cosas en la mente sin ninguna restricción o limitación, muchas veces sin respeto por la realidad o factibilidad, muy propio de los niños y también de los adolescentes. Cuando esta actividad creativa es planificada y organizada en grupos de trabajo, como podría ocurrir en una agencia publicitaria o en un taller de análisis y resolución de problemas o conflictos, esta actividad se denomina BRAINSTORMING, o (sesión de) tormenta de cerebros.
"Los autores de ficción deben echar a volar su imaginación"